Propiedades de las plantas medicinales: ¡natural no es sinónimo de inocuo!
Ser conscientes de las contra-indicaciones de las plantas medicinales es clave para beneficiarse de sus propiedades sin correr riesgos.
¿Qué hay que saber sobre las hierbas medicinales y su toxicidad? ¿Cómo podemos hacer un uso más responsable y prevenir sus efectos secundarios? ¡Sigue leyendo para saber más!
¿Todo lo que es natural, es inocuo?
¿Te suena eso de “es natural… si no te hace bien, tampoco te hará daño”? Pues, es un gran mito y a continuación te explico porqué. También, los hábitos saludables pueden ser perjudiciales si no se toman las debidas precauciones.
Por ejemplo, si nunca has practicado running no empezarás el primer día corriendo un maratón. Primero, probablemente, harás unos chequeos médicos. Luego, a ser posible, buscarás el asesoramiento de un profesional que te ayude a crear un plan de entrenamiento personalizado.
Lo mismo ocurre con los suplementos naturales a base de plantas. Ante todo, tal y como pasa con el deporte, hay que tener en cuenta la situación de salud de la persona que los toma.
En segundo lugar, para que los preparados a base de hierbas nos aporten beneficios tendremos que seguir el modo de empleo y las dosis recomendadas. Entonces, ¿por qué somos menos propensos a tomar precauciones cuando se trata de utilizar productos naturales para cuidar nuestra salud?
¿Qué sabemos sobre la toxicidad de las plantas medicinales?
Desde tiempos antiguos las plantas medicinales se han usado para prevenir o curar enfermedades, y sus propiedades han sido transmitidas generación tras generación.
Sin embargo, las plantas también han sido una de las primeras causas de muerte por intoxicación del hombre prehistórico.
Hoy día, los riesgos de intoxicación y efectos secundarios se pueden prevenir utilizando un poco de sentido común y tomando precauciones.
Gracias al desarrollo de las técnicas científicas, a mediados del Siglo XX se ha comprobado la eficacia de muchas especies vegetales para la salud humana. De este modo, se ha contribuido a la creación de procesos industriales avanzados para la extracción de los principios activos y para la conservación de los preparados.
La tradición primero y la ciencia después nos indican que los remedios naturales poseen propiedades curativas, pero hay que hacer un uso responsable porque también tienen contraindicaciones.
Contra-indicaciones de las plantas medicinales: ejemplos
El consumo de una gran cantidad de zumo de pomelo (Citrus x Paradisi) puede producir alteraciones del metabolismo si tomado mientras se hace un tratamiento a base de estatinas.
La nuez moscada (Myristica fragans Houtt.), especia muy utilizada en platos de todo el mundo y con propiedades benéficas para los aparatos digestivo y respiratorio, es altamente tóxica y alucinógena en dosis elevadas.
Estos son solo algunos ejemplos, pero también otras plantas medicinales comunes pueden producir efectos adversos aunque leves.
El consumo de plantas medicinales y preparados herbarios, por lo tanto, debería basarse sobre un uso correcto y racional, tanto para beneficiarse de las propiedades curativas como para preservarse de los efectos tóxicos.
¿Qué podemos hacer en la práctica para reducir el riesgo de los efectos secundarios producidos por las plantas medicinales y sus extractos?
Pautas para un correcto uso de las plantas medicinales y sus extractos
Esto es lo que deberías saber para garantizar un uso responsable de los preparados a base de plantas medicinales:
– Adquirir preparados de origen segura y en establecimientos de confianza.
– Seguir las indicaciones de un profesional de la salud que conozca nuestro estado de salud.
– Respetar las dosis diarias recomendadas, tanto para evitar efectos secundarios cuanto para obtener todos los beneficios posibles.
– Tener en cuenta todas las precauciones y recomendaciones en caso de suministro en niños, mujeres embarazadas o durante la lactancia, personas de tercera edad, pacientes pre y post operatorios, personas bajo tratamientos, donde el consumo de plantas medicinales requiere un conocimiento exacto de la condición fisiológica del paciente.
En todo caso, aclarar las dudas que tengas con tu médico es clave porque ciertas sustancias, a pesar de ser de origen natural, pueden retardar o frenar los efectos de otros medicamentos.